El autoconsumo de energía solar en España durante 2023

autoconsumo-en-2023-01.jpg

El año 2023 ha marcado una desaceleración en el ritmo de instalación de sistemas de autoconsumo de energía solar en España, tras un 2022 histórico que registró cifras récord con 240.000 instalaciones de placas solares nuevas. Sin embargo, a pesar de la disminución en la instalación de este tipo de sistemas, el impacto acumulado ha dejado una huella significativa que se ha visto reflejada en la demanda eléctrica del país.

Contribución del 3%: más que una cifra modesta

De acuerdo con los datos publicados por la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA), la proliferación de placas solares en tejados de casas, fábricas, naves y establecimientos comerciales redujo el consumo eléctrico en un 3% en 2023, casi el doble que en el año anterior. La generación total de estas instalaciones alcanzó los 7.300 gigavatios hora (GWh), lo que supone un aumento del 59%.

A pesar de que el 3% de reducción en la demanda puede parecer modesto, los técnicos de APPA señalan que es una cifra superior a la de generación eléctrica de tecnologías consolidadas como el carbón, la turbinación con bombeo, la solar termoeléctrica o la bioenergía. Además, el autoconsumo contribuyó significativamente a la mitigación del cambio climático, evitando la emisión de 1.4 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO₂) en 2023.

Barreras y desaprovechamiento: el desafío de los excedentes

Sin embargo, a pesar de estos logros, persisten desafíos en el aprovechamiento total de la electricidad generada. Según la APPA, las barreras regulatorias y técnicas impiden el vertido al sistema eléctrico de excedentes de electricidad generados por estas instalaciones. En 2023, se desperdiciaron más de 1,600 GWh de electricidad, equivalente al 0.7% de la demanda, lo que representa el 18% de la energía y supone unas pérdidas económicas estimadas en 131 millones de euros anuales.

Aunque el año pasado se registró una contracción del 27% en la instalación de nuevos sistemas de autoconsumo, España alcanzó casi 112.000 instalaciones residenciales y 15.500 industriales. Cada kilovatio doméstico instalado proporcionó un ahorro de 208 euros anuales, y a pesar de la variabilidad en el retorno de la inversión, la vida útil de estas instalaciones garantiza su rentabilidad a largo plazo.